Tanto en el mundo de los licores como en el del champán, es bien sabido que la elección del tipo de copa (con tallo, balón, etc.) y su capacidad influyen en la apreciación de los sabores equilibrados del vino. Lo mismo ocurre con las copas de oporto . Pero ¿significa esto que es imprescindible adquirir un juego de copas Baccarat o Riedel para servir, al igual que los sumilleres? Eso es lo que exploraremos en esta entrada del blog.
¿Cómo funciona la copa tulipán y por qué se utiliza más comúnmente para el vino de Oporto?

Principio de funcionamiento del vaso Tulipán:
Fase 1: Concentración de volátiles
En cuanto se vierte el alcohol en la copa tulipán, se inicia una reacción al entrar el vino en contacto con el aire. El vino de Oporto comienza a airearse, a oxigenarse. Esto revelará sus aromas primarios y secundarios. Deje pasar de 2 a 3 minutos para que se produzca esta magia, y se requiere una temperatura mínima de 16 grados Celsius.
Fase 2: Control de la evaporación del alcohol
Una vez que se revelan los aromas primarios y secundarios del Oporto, se desprenden del vino y se acumulan en el cáliz de la copa tulipán. Dentro de este cáliz, se concentran y quedan atrapados. En cambio, los gases que contiene el Oporto son más ligeros y no quedan atrapados en la copa, lo que reduce la desagradable sensación de ardor en la boca.
Fase 3: Ergonomía de la degustación
Cuando el bebedor lleve la copa a su boca, todas las notas aromáticas se dirigirán a su nariz, permitiendo la identificación de cada nota en su Oporto.














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